Pintura de interior: 5 consejos para ampliar las habitaciones
¿Qué pintura de interior utilizar en una habitación pequeña? ¿Qué pintura para una habitación de techo bajo?
Color, textura, efecto: consejos y técnicas para engrandecer sus habitaciones con unas pocas pinceladas.
Pintura interior
Estudio, pasillo o habitaciones pequeñas en espacios reducidos, la elección de la pintura es esencial. A menudo descuidada, la pintura de interiores sigue siendo una forma práctica y barata de ampliar una habitación y crear efectos espaciales sin tener que tocar las paredes o la estructura general de la habitación. Siempre y cuando, por supuesto, se sigan algunas reglas básicas, que se detallan a continuación.
Colores brillantes
Además de los colores, la textura y el efecto de la pintura de interior también afectan a la percepción del espacio. Las pinturas mate reducen los volúmenes porque captan la luz. En cambio, las pinturas brillantes, lacadas o satinadas reflejan las fuentes de luz y, por tanto, aumentan los volúmenes.
Este tipo de pintura de interior es fácil de mantener. Es por tanto perfectamente adecuado para zonas de mucho tráfico, como los pasillos, que suelen ser estrechos. El efecto de estos colores brillantes puede potenciarse colocando espejos en lugares estratégicos: por ejemplo, en la pared opuesta a una ventana
Colores que sean claros
Para maximizar la sensación de espacio en una casa o piso, es preferible utilizar pinturas de colores claros que reflejen la luz. Todos los tonos de blanco, crudo, beige, pero también los pasteles son adecuados. Si aún te resulta difícil renunciar a los colores más oscuros, utilízalos en pequeños toques en zócalos o en una puerta. Del mismo modo, para hacer una habitación más cálida, puedes pintar la pared donde se encuentra el cabecero con un color más pronunciado.
Pequeños espacios y la pintura de interior: juega con colores que contrasten
La luminosidad tiene un impacto importante en la percepción del tamaño de una habitación. Aplicar una pintura de interior clara a las paredes más oscuras de la casa da la impresión de que toda la habitación está bañada en luz. Este efecto óptico hará que sus espacios sean más amplios y agradables de habitar. Piensa en decorar tus paredes con camafeos (gradaciones de un mismo color). Para evitar la sobrecarga, los decoradores de interiores aconsejan no superar los tres colores. Más allá de eso, es probable que se produzca el efecto de un embrollo. Combina tres tonos del mismo color, del más oscuro al más claro, en la pared con menos luz y en el techo.
Pintura y espacios reducidos: dar sensación de altura
Las habitaciones de techo bajo tienden a reducir la sensación de espacio y a transmitir una sensación de asfixia. Para contrarrestar este efecto y aumentar la sensación de volumen, basta con jugar con los colores de los suelos y los techos. Elija una pintura de interior de un tono más claro que las paredes para el techo. Proteja este efecto eligiendo un suelo del mismo tono o cercano a él.
Pintura de interior y espacios pequeños: utiliza los patrones con cuidado
Para romper la monotonía de una habitación, puede ser tentador optar por patrones y efectos gráficos.
Por ejemplo, las rayas finas pueden tener un efecto óptico interesante. Las rayas verticales dan una impresión de altura, mientras que las rayas horizontales acentúan la profundidad. Dibujadas cuidadosamente en un tono más claro, estas rayas pueden vestir un salón o un dormitorio y darle más profundidad. Deben dibujarse en una pared ya pintada, en la que las marcas para pintar las rayas estén perfectamente delineadas.